El ITE junto a cuatro grandes centros tecnológicos – CARTIF, IKERLAN, AICIA e ITG – conforman esta alianza tecnológica española que desarrolla soluciones para comunidades energéticas locales de balance neto positivo.
Fortalecer la capacidad tecnológica y fomentar una sólida cooperación entre los cinco centros tecnológicos de excelencia que integran la red con el objetivo de desarrollar soluciones tecnológicas que faciliten el despliegue de comunidades energéticas locales de balance neto positivo. Ese es el principal foco de trabajo de este consorcio tecnológico liderado por ITE y que también agrupa a CARTIF, IKERLAN, AICIA e ITG. Los resultados obtenidos por la red HySGrid+ también contribuirán a desarrollar un marco regulatorio, de certificación y estandarización que permita impulsar este nuevo modelo energético en España.
HySGrid+ es la única red de excelencia con esta finalidad promovida en el marco del Programa Cervera para Centros Tecnológicos que impulsa el Ministerio de Ciencia e Innovación y el Centro de Desarrollo Tecnológico Industrial (CDTI).
ITE, que cuenta con el apoyo del IVACE, lidera la coordinación y el seguimiento de las actividades e indicadores establecidos en el plan estratégico de la red. Un plan que, además de garantizar la capacitación de la red de centros tecnológicos en el desarrollo de las mencionadas soluciones tecnológicas, también contempla actuaciones orientadas a aumentar la participación de empresas españolas y, en especial, de las PYMES en proyectos internacionales, así como actuaciones de divulgación y difusión.
Balance neto positivo: una nueva etapa en la compensación de excedentes
Lograr un balance energético positivo significa que la energía entregada por la comunidad deber ser mayor que la energía suministrada desde el exterior y esta debe estar basada principalmente en fuentes renovables.
Esta consideración requiere una generación de energía local e intensiva basada en fuentes renovables, gestionar de manera óptima la flexibilidad aportada por recursos energéticos como los sistemas de almacenamiento (almacenamiento estático o almacenamiento dinámico a través del vehículo eléctrico), así como un papel más activo del usuario, a través de esquemas de respuesta a la demanda o agregación de usuarios para proveer servicios de flexibilidad.
En cuanto a las redes de calor o redes de calefacción y refrigeración, éstas deberán basarse en fuentes de energía disponibles localmente, renovables y bajas en carbono. De esta forma, también se deberán explotar las sinergias y complementariedades existentes entre la energía térmica y eléctrica y sus redes asociadas.
Sin embargo, la combinación segura y eficiente de todos estos factores no está exenta de retos y por ello todavía es necesario investigar en nuevas estrategias y soluciones tecnológicas que garanticen el desarrollo de comunidades locales energéticamente positivas, eficientes, renovables, seguras y fiables.
Asimismo, también es fundamental desarrollar el marco regulatorio y plantear nuevos mecanismos de mercado que permitan a los usuarios finales de la energía, a través de las comunidades energéticas, ser protagonistas en el proceso de transición energética. La red de excelencia HySGrid+ permitirá dar respuesta a esa necesidad.
Áreas de trabajo prioritario de la red HySGrid+
En términos generales, la red de excelencia investigará nuevas estrategias y soluciones tecnológicas que habiliten la planificación óptima, la explotación eficiente y el control inteligente de comunidades energéticas locales y de sus recursos con la meta de alcanzar un balance energético positivo basado íntegramente en fuentes renovables.
En particular, abordará el diseño, desarrollo y validación de tecnologías que permitan, entre otros aspectos, diseñar comunidades energéticas locales bajo premisas de balance de energía positivo, gestionar de manera eficiente la comunidad con apoyo de recursos flexibles (sistema de almacenamiento, cargas gestionables, estaciones de recarga, etc.) para garantizar un balance neto positivo, integrar las redes térmicas y eléctricas de la comunidad facilitando el intercambio de flujos energéticos entre ambas y facilitar el intercambio de energía entre los diferentes miembros de la comunidad. Asimismo, la agrupación también trabajará en el planteamiento y estudio de nuevos modelos de negocio innovadores que potencien el despliegue de comunidades locales energéticamente positivas basados en la comercialización de servicios energéticos.
Pasos firmes para una transición energética sostenible
Las comunidades energéticas representan un modelo clave para lograr una transición energética sostenible y justa cuyo despliegue en las redes de distribución traerá multitud de beneficios sociales y medioambientales que, no solo afectarán a la comunidad y sus miembros, sino a toda la sociedad en su conjunto, ya que favorecerán el cumplimento de los objetivos de descarbonización, mejorarán la eficiencia energética y darán mayor seguridad al suministro al ser un modelo energético que acerca la generación al consumo.
Con este nuevo modelo energético se busca promover un uso más justo, eficiente y colaborativo de la energía. En las comunidades energéticas, los miembros son sujetos activos con decisión que se organizan y colaboran entre sí para producir, auto consumir, gestionar, almacenar y vender su propia energía, así como para promover otros servicios energéticos dentro de la comunidad como por ejemplo servicios de eficiencia energética o de recarga para vehículos eléctricos.